Día a día ha ido aumentando la “conciencia alimenticia”, dándole la importancia merecida a la calidad y cantidad de nutrimentos que los vehículos de nutrimentos y vida nos proporcionan, conocidos comúnmente como “alimentos”.
Esto se debe a los constantes avances y descubrimientos que comprueban una y otra vez, como una buena salud esta vinculada con la calidad de la alimentación que día a día se consume.
Es por ello que la búsqueda por el alimento “ideal” comienza desde que nos encontramos frente a estantes repletos de opciones, distintas marcas y sellos de certificaciones en alimentos.
Pero, ¿cómo se puede estar seguro que los
alimentos o productos que se eligen, tiene
las características buscadas?
Bueno, existen autoridades en cada región o país que garantizan la procedencia y características de cada alimento mediante Sellos de Acreditación o Certificación. Los más comunes son:
“Alimentos Orgánicos”.
También conocidos como Biológicos o Ecológicos, son aquellos cultivados, procesados y manipulados mediante métodos naturales, evitando compuestos químicos o sintéticos, prohibiendo uso de semillas transgénicas, hormonas y antibióticos.
Amigables y sanos para consumidores, trabajadores y responsables con el medio ambiente.
“No Alimentos Genéticamente Modificados”
(Non-Genetically Modified por sus siglas en inglés) hace referencia a la ausencia de alimentos modificados genéticamente. Son también conocidos como Transgénicos, organismos cuyo ADN o material genético ha sido alterado a través de la introducción de genes de una especie a otra, transfiriendo características, propiedades o funciones.
Los alimentos transgénicos más comunes son el maíz, trigo, soya y papa.
“Certificación Kosher” 
Kosher significa “apto” o “adecuado”. Es la certificación máxima que garantiza productos elaborados de acuerdo a las normas religiosas impartidas al pueblo judío en la Biblia. Por lo que aseguran ser aptos para cualquier judío. Dentro de esta certificación existe la “UO”, que significa “Unión Ortodoxa”, (sello superior izquierdo) conocida como la certificación más grande y reconocida en el mundo, “codiciado sello de aprobación”. Realza producto de forma inmediata, elevando su percepción de calidad.
“Gluten Free (Sin Gluten)” 
Certifica que el producto alimenticio sea y haya sido procesado y empaquetado libre de gluten. El gluten es una proteína generalmente encontrada en cereales como trigo, centeno y cebada, la cual es altamente alergénica y podría llegar ser peligrosa para la salud en personas que padecen la enfermedad celíaca, por lo cual es de suma importancia la presencia de este sello en los productos aptos para intolerantes o alérgicos a este componente.
“Certificado Vegano” 
Productos libres de alimentos de origen animal, ya sean carnes o derivados como huevo, lácteos o miel de abeja. Existe una medida más, también impresa en el producto, que muchas veces puede dejarse pasar y expone la entera composición del alimento, refiriéndose a los ingredientes en un producto.
Pero ¿por qué son importantes? Porque en innumerables ocasiones existen productos los cuales contienen ingredientes los cuales no se pueden ni pronunciar, son indescriptibles. Les tengo una noticia, el organismo tampoco los reconoce.
Es importante hacer hincapié
en que el acomodo de los
ingredientes siempre será
del que existe en mayor
proporción al menor. Existen
productos los cuales tienen un
2% del alimento que se ofrece.
Busquemos alimentos reales, sin procesar, frescos y de preferencia locales, apoyando el esfuerzo y economía de la región. Es de vital importancia hacer valer el derecho como consumidores y preferir alimentos de buena calidad, lo más naturales y menos procesados posible. Recordando que su salud y calidad de vida serán los principales beneficiados.
Por: Fernanda Encinas
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Fernanda Encinas, Nutrióloga